Una de ellas, ha sido recientemente mamá y nos preguntaba si podría tomar ibuprofeno por aquello de que está dando el pecho a su bebé.
Para esa pregunta hubo todo tipo de respuestas.
- Ni de coña
- Pregúntale al pediatra
- por su puesto
- no tengo ni idea
- ante la duda, no te lo tomes
etc, etc
Mi respuesta fue, "sí, y para que te quedes más tranquila puedes consultar la web, e-lactancia.org"
A raíz de esto me apunté en la agenda hacer un post contando la experiencia que tuve yo con esta web y como la descubrí. Pero bueno, ya sabéis como es esto, lo vas dejando, siempre sale otro tema, y al final han pasado un par de meses y todavía no había escrito más de 2 párrafos.
Mi sorpresa llegó la semana pasada leyendo un post de Amor maternal al enterarme de que van a despedir (a día de hoy imagino que ya estará en la calle) al Dr. Jose Mª Paricio, Jefe del servicio de Pediatría del Hospital de Denia y promotor y responsable de la web e-lactancia.org
Sorprendida es poco. Me quedé a cuadros.
Yo voy a copiar aquí la opinión del Dr Paricio sobre el tema.
No es por un tema de gestión ni de resultados que quieren prescindir de mí; mis indicadores son tan buenos como siempre y somos el servicio del hospital mejor valorado por los ciudadanos con índices de satisfacción rozando el 100%. No es por eso, es por un tema de confianza, de fidelidad, de sumisión, de que saben que les discuto órdenes y de que no las acato si no las tengo claras. La Conselleria es muy libre de ceder la gestión de sus centros y departamentos a empresas privadas; puede haber inteligentes y ágiles formas de gestión que mejoren los rendimientos de nuestras centros. Pero deberían controlar la competencia profesional y políticas de gestión de personal de los gestores de sus concesiones, que más parecen centrarse en resultados económicos que en otros, los de Salud. Hoy, con la crisis, muchos creen que todo vale y muchos creemos que no, todo no vale, no a cualquier precio.
Lo que más mal me sabe es que la posible continuidad del servicio está en peligro: yo no soy importante, es el grupo que hemos creado, el estilo eficaz pero tranquilo de asistencia profesional, pendiente de los valores y deseos de las personas, en especial de las madres que siguen siendo las que más se ocupan de los niños, lo que está en juego para su pervivencia en un futuro próximo en el que por ley de vida el 40% de nuestro grupo habrá alcanzado la jubilación"
Como podéis imaginar estoy totalmente en desacuerdo con esta decisión que se ha tomado, es más, creo que es un error fatal, imperdonable y estúpido, pero no me voy a poner a despotricar contra las personas que hayan tomado esa decisión.
Mi forma de "apoyarle" será contando como me ayudó a mí personalmente el Dr. Paricio para que veáis cual es el trabajo que realiza y el tipo de persona, para mí de una calidad humana extraordinaria, a la que van a largar, así porque sí.
Cuando tenía unos 20 años de edad, comenzaron a salirme algunas placas de psoriasis en los codos. Algo, sobre todo, antiestético, pero nada grave ni muy llamativo.
Así se mantuvo hasta que me quedé embarazada y mi cuerpo reaccionó de la forma más extraña.
Y digo extraña porque generalmente la psoriasis, curiosamente, durante el embarazo suele mejorar, incluso desaparecer.
Pero yo, como dice mi madre soy el espíritu de la contradicción, tuve que ir en contra de toda regla. Y comenzó a extenderse por varias zonas del cuerpo.
Como creía que no podía darme ningún pomada para remediarlo, aquello fue cada vez a más. Nació Boliche y tampoco se freno.
Cuando Boliche tenía 10 meses más o menos me fui al dermatólogo a que me viera.
Algunas os acordareis de ese cafre que se dedicó a decirme que era "igual que las gitanas por seguir dándole el pecho a mi hijo con esa edad".
Me puso un tratamiento con rayos PUVA y me dijo que o dejaba el pecho o él no me pondría en tratamiento.
Así que me di los rayos PUVA pero aquello y no mejoraba nada. Al contrario cada vez tenía la piel peor.
Como no veía mucho arreglo, lo fui dejando hasta que un día ya desesperada porque casi no me podía ni sentar, me fui a urgencias.
La médica de cabecera solo pudo echarse las manos a la cabeza cuando vio en que condiciones estaba, darme la baja inmediata y enviarme al hospital de urgencias.
Tuve la suerte de que en urgencias me vio una doctora muy maja que se tiró el rollo y me subió a las consultas para que me viera la dermatóloga que según ella más puesta estaba en el tema de la psoriasis y que casualmente pasaba ese día consulta.
Su respuesta fue muy parecida a la de su colega. Deja la lactancia porque te tienes que poner en tratamiento ya.
Pero no me dijo que ella supiera con total seguridad que ese medicamento no era compatible con la lactancia, no. Me dijo, "total el niño ya tiene 13 meses y por si acaso..."
No queda otra, tenía que dejar el pecho y ponerme en tratamiento, o al menos eso decían todos.
Salí de la consulta, me senté en la sala de espera y me puse a llorar. Llamé a mi madre y se lo conté. En qué hora!, menuda bronca me cayó por llorar "por eso".
En realidad, yo lloraba por todo. Me encontraba fatal y encima nadie entendía que no quisiera dejar de dar el pecho.
Por su puesto que yo sé que mi salud es lo más importante, eso sobra decirlo, pero es que nadie me aseguraba que fuera necesario dejar el pecho. Me lo decían por curarse en salud y eso me dolía enormemente.
Me dio 15 días para destetar a Boliche mientras me tomaba unos corticoides y después empezaríamos con el tratamiento de ciclosporina.
La primera semana lo pasé fatal. Mientras le daba los primeros biberones de leche a Boliche no paraba de darle vueltas al tema. Tenía que hacer algo, por lo menos habría que agotar todos los cartuchos.
Así que me puse en marcha. Tiré varias cañas para intentar localizar a la única persona que pensé que me podría ayudar. Necesitaba contactar con Carlos González. Y por suerte una de ellas dio su resultado.
Hablé con él varias veces sobre el tema y con el llegó la esperanza.
Él me dirigió al Hospital de Denia y al Dr. Paricio.
Entre los dos me enviaron la documentación necesaria para demostrar y argumentar a mi dermatóloga que la medicación con la que me iban a tratar era perfectamente compatible con la lactancia.
Ninguno de los dos profesionales me conocían y ambos me ayudaron igualmente dándome su apoyo y toda la información que necesitaba, y todo ello ¿a cambio de qué?. De nada.
Para mi tiene mucho valor lo que hicieron, os podéis hacer una idea...
Pero no solo porque me ayudaran de forma altruista y sin ánimo de lucro, que ya me parece una actitud encomiable, sino porque gracias a ellos Boliche y yo pudimos mantener la lactancia otros 13 más.
Y después de mi experiencia personal, ahora me entero de que le van a dar la patada a una persona que con su trabajo y su buen hacer ha ayudado a tanta gente que lo ha necesitado, como es mi caso, por vete tú a saber que intereses pueda haber detrás de esto, que no puedo más que sentir indignación hacia una decisión tan absurda y errónea como esta.
Probablemente mi testimonio se lo pasen por el arco del triunfo, si es que a alguien relacionado con esa decisión le llegara, pero es lo mínimo que puedo hacer por alguien que teniendo la responsabilidad que tenía, gastó algo de su tiempo (con lo que escasea) en echarle una mano a una "loca de esas de la teta".
Gracias Dr. Paricio, por su ayuda, por su tiempo, por tener un código ético fuera de lo común.
En mi nombre y en el de mi hijo, GRACIAS Y MUCHA SUERTE.
Si alguien quiere firmar en apoyo al Dr. Paricio puede hacerlo aquí
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