"...El placer ha sido mio..."

...El placer ha sido mío...

SACRIFICIO
(RAE): Acción a que alguien se sujeta con gran repugnancia por consideraciones que a ello le mueven.

No, señores y señoras, dar el pecho no debe ser un sacrificio. Debe ser un PLACER.

jueves, 8 de julio de 2010

Educación sexual


Ayer, mamá (contra) corriente publicó un post que ha creado mucha polémica entre sus seguidores, entre los cuales me incluyo.
Hablaba sobre la nueva ley del aborto.
Con un tema así sobre la mesa, cabía esperar que hubiera todo tipo de comentarios. Lo que más me ha gustado es que aunque había posturas enfrentadas en las 2 esquinas del cuadrilátero, la sangre no ha llegado al rió en ningún momento. Todos los comentarios han sido muy respetuosos, aunque tratándose de un tema tan delicado, en algunos momentos parecía que la chispa se iba a encender para dar paso a un incendio incontrolable. Por suerte y sobre todo por respeto y educación, eso no ha llegado a ocurrir.

Mi postura es la de alguien que se encuentra en tierra de nadie porque estoy de acuerdo con bastantes cosas de ambas posturas. Aunque tengo clarísimo que en último caso, no sabría como actuaría porque hasta que no te ves en esa situación, no estás al 100% seguro de cómo reaccionarias.

Pero hoy no quiero hablar de eso, que ya se habló ayer bastante y lo que queda…
Quiero hablar de algo que se ha tocado por encima porque está muy relacionado con el tema del aborto, como tantos otros. Porque el tema del aborto, es una planta que tiene bajo la tierra numerosas raíces.

Me refiero a la educación sexual, y voy a hablar de ello desde mi experiencia personal.
Nunca creí que fuera a contar esto a nadie, a parte de mi esposísimo, el cual se parte de risa cada vez que sale el tema a relucir, pero como no os conozco personalmente pues me da menos apuro. En cualquier caso negaré haber dicho lo que relataré a continuación y este post se autodestruirá en 5, 4, 3, 2 …..

Yo he estudiado en 4 colegios, además de la escuela infantil. Uno era público, otro privado, el tercero de monjas y el último de curas. Creo que tengo una visión bastante amplia del sistema educativo, en lo que se refiere a la etapa que yo viví y tengo trenta y tantos.

En ninguno de ellos y repito NINGUNO, he recibido información sobre la sexualidad. Ni para bien ni para mal.
Yo he sido una niña normalita, tirando a pardilla, de esas que estuvieron jugando con la Nancy hasta casi los 14 años y veían Barrio Sésamo a la hora de la merienda.
Cuando estaba en 8º de EGB, algunas chicas de mi clase, se remangaban la falda del uniforme hasta que casi se les veía el culo y se iban con chicos que las iban a buscar a la salida del colegio en una moto súper chula.
Mientras tanto yo vivía en los mundos de Yupi y pensaba que no iba a beber, a fumar y lo peor de todo, que no iba a follar hasta que me casara. Os puedo asegurar que esa idea no la saqué ni del colegio ni de mi casa.
Así que cuando oigo que una NIÑA de 13 , 14 o 15 años se ha quedado embarazada, mi cerebro sufre un shock.

Cuando tenía 15 o 16 años, descubrí yo sola, os juro que no recuerdo como, lo que era un orgasmo. Estaba flipando de lo que sentía, cuando estaba apunto de llegar al orgasmo me asusté tanto que paré. Pensaba que me iba a morir!!! jajajajaja, si, si , como lo cuento. Así era yo de ignorante. Pero no tenía ni idea de lo que estaba sucediendo. Criaturita…

¿Hubiera sido bueno que mi madre me hubiera hablado de esas cosillas en su momento?, pues no lo sé, pero yo preferí y prefiero que eso no hubiese sucedido. Quizá porque el tema del sexo no se tocaba para nada. Lo más seguro, es que fuera porque mi madre me veía muy cría como para hablarme de esas cosas.

Pasados unos años, después de haber salido con unos cuantos chicos a los que sólo les permitía unos cuantos besitos y poco más, empecé una relación algo más seria con el que se suele conocer como el primer novio y, claro, se lo conté a mis padres.
Lo único que me dijo mi madre, cuando mi padre no estuvo delante, fue: hija mía, los preservativos están en el último cajón de mi mesita, no vaya a ser que te quedes embarazada o cojas alguna enfermedad, por dios, ten cuidado.

Para mi fue suficiente, aun así me dio mucha vergüenza que me lo dijera, pero creo que fue todo lo que me necesitaba decir.
De que más íbamos a hablar, de cual es la mejor posturita, de que hay preservativos con sabores, yo creo que no.
Quizá, hubiera sido bueno que también me recomendara para cualquier duda algún centro de planificación familiar, pero seguramente no lo hizo porque ni si quiera ella sabía de su existencia. También lo descubrí yo sola.
Para mi la forma de proceder de mi madre fue básica pero correcta.

Para mi, lo más importante es que los jóvenes estén bien informados en lo que a seguridad ( y en este saco meto los embarazos no deseados) se refiere.
Todo esto en lo relativo al sexo, claro, el tema de las relaciones personales es otro cantar.

Para mi está claro que la madurez sexual de cada persona va a ritmos muy diferentes, por lo que no creo que dar charlas de sexo en el colegio sea lo más adecuado, principalmente porque lo mismo a unos los puedes asustar y a otros…, bueno a lo mejor los otros te pueden dar a ti un master especializado en el tema.
También es cierto que los chicos/as de hoy en día son muuuuucho más espabilados de lo que éramos hace años, en general. Debemos tener en cuenta que los jóvenes en la actualidad tienen a su alcance más información (TV, internet, etc) de la que disponíamos nosotros hace 10 o 15 años.

Yo siempre he sido de las que piensan que en el colegio no se debe educar a los niños, se les debe formar académicamente. La educación “general” se debe recibir de la familia. Y para mí, el tema de la educación sexual entra dentro de la educación “general”, que es donde realmente se ve y se conoce el grado de madurez mental del chico/a.
Por eso, estaré abierta y dispuesta a facilitarle a mi hijo cualquier información que me demande sobre este tema, pero tampoco creo que vaya a ser yo la que saque el temita, hasta que no vea que está preparado y eso será cuando yo lo valoré oportuno, no cuando el colegio decida que sea el momento.
También tengo claro que la información que le de sobre la sexualidad, será clara y sin rodeos, así que lo de la flor y la abejita queda totalmente desterrado.

Por supuesto, todo lo que he dicho, sólo son ideas que tengo hoy por hoy. El día que llegue el momento de ponerlo en práctica, será otro cantar. Sólo espero estar a la altura.
Al igual que el tema del aborto, por suerte nunca me he visto en la tesitura de tener que tomar una decisión así, una puede tener las ideas muy claras y llegado el momento cambiar radicalmente de postura. Hay que valorarlo in situ.
Además he de contar con un factor primordial en esta ecuación, que es mi esposísimo, el cual mantiene un punto de vista algo distinto al mío, digamos, más liberal. Pero eso será otra historia…