"...El placer ha sido mio..."

...El placer ha sido mío...

SACRIFICIO
(RAE): Acción a que alguien se sujeta con gran repugnancia por consideraciones que a ello le mueven.

No, señores y señoras, dar el pecho no debe ser un sacrificio. Debe ser un PLACER.

lunes, 2 de agosto de 2010

And the Oscars go to...


Mientras una amiga me está maquillando para caracterizarme como un tío (Ambrosio), más bien feo, noto como mis tripas se estrujan una y otra vez.

Dios, ¡que miedo!, me quiero ir a mi casa y meterme debajo de la cama. Ays!, si es un canapé no puedo meterme debajo. Da igual pues me meto dentro del canapé. O en algún armario. Me es indiferente. Sólo quiero salir de aquí corriendo.
¿Pero quien coño me manda a mi meterme en estos fregaos?.

Claro, es muy guay decir, “sí, yo me apunto al teatro”, cuando quedan 2 meses para la representación. Que chulita!.

Pero porque no me habré metido la lengua…ejem…, ya se sabe donde. Jo!, pero es que me apetecía hacer algo nuevo y al fin y al cabo sólo podíamos ensayar los fines de semana y aprovechando las siestas de Boliche. Así que era buena hora.
Pero aun así, ahora me vienen los arrepentimientos.

- Teta, no te muevas, que así no te puedo pintar.

- Perdona, pero es que estoy muy nerviosa. Se me ha olvidado el “tiesto” jijiji

- ¿El tiesto?

- Jijiji (risa nerviosa), sí, es que anoche una prima mía me preguntaba que qué tal llevaba el texto y como la música de la horrible-orquesta estaba de fondo pues yo la entendía que qué tal llevaba el “tiesto”. Y claro ya tuvimos coña para toda la noche.

- Jejejejeje, si la verdad que la orquesta fue criminal. Bueno, pero no te preocupes que el “tiesto” no se te va a olvidar, así que para quieta un rato que así no te puedo pintar.

- Si es que se me va a olvidar, ya verás, ya verás, ya verás…puf!, que nervios.

- Estate quieeeeeeeeeeeeeta.

- Pero si es que me he puesto a repasarlo y cuanto más lo leo más se me olvida.

- Pues deja de leerlo que te lo sabes de sobra.

Entra en la sala donde nos estamos preparando "Evarista", está llorando a moco tendido. Su madre detrás, cariño tranquilízate, que así no puedes salir...
Pobrecilla, tiene 12 años y está súper nerviosa. No me extraña que llore, a mí, porque la vergüenza no me deja que sino también me ponía mano a mano con ella.

Sólo quedan 5 minutos para empezar.

Noto como el corazón me late a mil por hora. No me imagino lo que debe ser estrenar una obra en un teatro de los de verdad. De los importantes.
Pensando que la crítica estará acechando, esperando cualquier error que cometas para despellejarte viva. Claro que los actores importantes, no trabajan por amor al arte, nunca mejor dicho.
Unos más que otros, pero todos se llevan sus buenas perrillas al bolsillo.

Nosotros, que nos juntamos por pasar un buen rato y reírnos de lo chorras que somos, no sólo no cobramos sino que nos tenemos que costear todos los gastos que se originen y no se puedan solucionar con algo de imaginación y algún que otro invento casero.

Pero aun así, salvando esa distancia abismal que nos separa, a los cutre-domingueros de los ACTORES de verdad, existe un sentimiento común que nos hace a todos especialmente vulnerables y frágiles en ese momento previo al estreno. El miedo al fracaso.

…¿qué pasa?, ¿qué pasa?...
...no se preocupe, robe, robe usted tranquilo, si yo no le voy a molestar…
…Una cerveza, mujer, una cerveza…
…¿pero qué dices? , si me llamaban Ambrosio el bien hecho…
…mejor cuando salgas del talego te apuntas a un cursillo…

Me vienen frases sueltas a la cabeza. Falta un 1 minuto. Noto un sudor frío en las manos. Dios mío, y si se me olvida y me bloqueo. No, no pienses eso Teta, ya verás como sale todo de carrerilla. Y si me reconoce Boliche y me empieza a llamar y me desconcentro. No, no creo que me conozca con este careto y estas pintas.

Chicas!, venga colocaos en vuestras posiciones!!!.

Me tiembla todo. El corazón me late tan fuerte que creo que todo el mundo podrá oírlo. La adrenalina me sale por los ojos.

Nos están presentando. La gente aplaude…

"Evarista" coge el micro.

- EVARISTA: ¡Papá!, ¡papá!.
- AMBROSIO: ¿Qué pasa?, ¿qué pasa?
- EVARISTA: Que estoy oyendo ruidos.
- AMBROSIO: Se habrá peído tu madre.
...

Todo salió bien; que digo bien, salió genial.

Cierto que el sonido no era muy bueno pero no se le puede pedir peras al olmo. Es lo que tiene hacer estas cosas para las fiestas del mini-pueblo.
Al principio estábamos un poco tensas, pero según se iba desarrollando la obra, íbamos relajándonos y disfrutando de lo que hacíamos.
Después de acabar, llegó el gran aplauso.

Y después un gran suspiro y una sensación de alivio y satisfacción tremenda. Pero me da a mi que el año que viene no sé si me pillarán a mi en otra de estas.
Algo más de 2 meses preparándolo y ahora en cosa de treinta minutos, todo se acabó.

En fin, por si os pica la curiosidad os pongo un trocito de la representación de la obra EL CHORIZO ENMASCARADO, que encontramos en youtube y que nos dió alguna que otra idea.
La mía, lógicamente, no os la puedo poner. Me moriría de vergüenza. Además estaría bueno que el momento de conocerme fuera estando yo caracterizada como un tío, feo y con barriga (para disimular las tetas).
No, no sería justo. Entendedme.

Muchas gracias a todas/os por desearme mucha mierda. Aunque a alguna se le escapara el “mucha suerte” tan temido jajajajaja. Todo salió perfecto. Y sin necesidad de ninguna bebida espirituosa (que gracia me hace ese nombre).
Y lo de la fama, pues va a ser que no.
No me pareció ver por allí a nadie del Cuore. Mira que ya me veía yo paseando por la alfombra roja, ensayando el discurso de agradecimiento mientras Penélope Cruz gritaba con voz de pito que la ganadora del Oscar era TEEEEEETA!!!!. Y por descontado firmando autógrafos y haciendo posados en la playa como la Obregón, pero con el triple de cuerpo, claro.

Ellos se lo pierden, porque no teníamos desperdicio.
Ni siquiera boliche me reconoció, aunque dice mi esposísimo que me miraba muy fijamente. Algo se debía oler…

---