"...El placer ha sido mio..."

...El placer ha sido mío...

SACRIFICIO
(RAE): Acción a que alguien se sujeta con gran repugnancia por consideraciones que a ello le mueven.

No, señores y señoras, dar el pecho no debe ser un sacrificio. Debe ser un PLACER.

viernes, 10 de diciembre de 2010

Hay amores que matan

Mira que yo achucho y achucho a Boliche 14.000 veces al día y el pobre aguanta y hasta le gusta, pero yo sé que en general le hace poca gracia lo del manoseo.
Hasta su seño me dice que cuando hacen el tren en clase, él tiene que ser el último porque no le gusta que le vayan agarrando.
Una cosa son unos besitos y un abrazo, que hasta ahí tiene pase y aguanta y otra es que le anden agobiando. No puede. Es superior a él, que le vamos a hacer.

El otro día estaba Boliche jugando con el hijo de una amiga tan contento y tan feliz.
Cuando de pronto en un ataque de pasión, el hijo de mi amiga empezó a abrazar fuertemente a Boliche.
El nene que pasa de los hombros al cuello de Boliche, Boliche que se ahoga, el otro que no le suelta y se caen los dos al suelo. El nene que en la caída le da con la cabeza en el ojo a Boliche (donde tenía un moratón desde hace unos días), Boliche que se pone muy nervioso y empieza a llorar, el otro que no le suelta. Boliche que se intenta zafar pero el otro cuanto más ve que se le escapa más le aprieta.
Que horror!, aquello parecía un combate de pressing catch.

Yo que veo que la situación se pone crítica y que veo que mi amiga no levanta el papo de la silla para poner paz, me levanto y cojo a Boliche. Le intento calmar y le digo que su amiguito sólo quiere darle cariño porque le quiere mucho y que no le quiere hacer daño. Y le digo al nene que es que a Boliche no le gusta que el anden agarrando, pero nada oye.

Boliche que ve que, aun en mis brazos, el otro no le suelta las piernas y llora con más fuerza y grita, “mamaaaaaaaaaaaaaaaaa pupaaaaaaaaaa!!!!”, pero nada que no hay manera, que el nene no se despega ni con agua caliente.
La otra que está tan feliz viendo el panorama, y yo que ya me estaba calentando y me daban ganas de soltar ya el, “quita cooooooño!”.
Pero nada, que no le soltaba ni a la de tres. De tanto tirar le quitó una bota del pie.
Y viendo el percal me levanto para irme a casa cuando oigo que la abuela del nene que estaba detrás de nosotras, le dice a una amiga, “es que mi niño es muy cariñoso…”
Así que me di la vuelta y con una sonrisa que no me cabía en la cara le digo con todo mi buen talante, “¡si, hija sí, pero es que hay amores que matan!”.


P.D1: CONTROL DE RÉGIMEN, 0 kgrs. Peso lo mismo que cuando me fui de puente.
Uf!, ya estaba yo cagaita cuando me he subido a la báscula.

PD.2: Que paséis buen finde.