Todavía queda mucho para las vacaciones de verano, pero mentalmente ya voy pensando algunas cosillas que tengo que preparar para llevar.
Entre ellas está "mi aliado más odiado" para devolvérselo a su propietaria. El sacaleches.
Hacía tiempo que tenía ganas de contar mi experiencia con ese trasto diabólico que me ayudó a salvar la lactancia, pero nunca encuentro momento y esta semana voy de cabeza pero no me apetecía ir dejándolo atrás.
Tengo mil cosas de las que quiero hablar pero me falta tiempo.
Mi aliado más odiado es de la marca Avent, de tipo manual y me lo dejó una prima mía. Así que como reza el refrán, "a sacaleches prestado no le mires el mecanizado".
Los primeros contactos los mantuvimos en Reyes, cuando Boliche tenía 15 días de vida, por aquel desagradable episodio del agujerito en el pezón, por decirlo fisnamente, y no volvimos a saber más de él, hasta que 1 mes antes de ponerme a trabajar, decidí crear la gran reserva de leche del condado de Bolichelandia.
En esos momentos, Boliche tenía 3 meses y la lactancia materna ya estaba bien establecida.
Las primeras semanas fueron unos momentos difíciles, de agobio y agotamiento.
Siempre preguntándome, ¿por qué no me pueden salir las cosas bien a la primera?
Por aquel entonces mi sueño y yo andábamos reñidos y él se había largado de casa con otra, así que mis noches eran eternas.
Y ese cansancio se arrastraba detrás de mí como una babosa y hacía que cualquier pequeño esfuerzo se convirtiera en toda una odisea.
Recuerdo estar sentada en el sofá de casa con la teta al aire y dale que te pego al mecanismo.
Las primeras semanas me costaba un triunfo sacar algo. A veces después de llevar una hora dándole al tema miraba el vaso y solo habían caído unas gotas.
Ni si quiera llegaba aquello para darle ni 20 ml. Fatal.
Probé a sacarme la leche delante de la cuna de Boliche para estimularme, probé a mirar una foto suya, me daba masajes, también lo intentaba mientras el mamaba, pero me resultaba muy complicado porque me faltaban manos, así que tampoco.
Mi hermano que algunas noches venía a cenar, me miraba con cara de lástima y decía que aquello era inhumano.
Pero claro yo que soy igual de bruta para todo, me ponía a darle candela y me tiraba una hora entera sin parar. Meeec!!! error!!!
Eso no se debe hacer, lo aconsejable es intentar 10 o 15 minutos y descansar por lo menos una hora, peeero como siempre la falta de información y esa facilidad mía por hacer las cosas a lo bruto, volvían a hacer de las suyas.
Ay! madre, que malo es esto de la ignorancia.
El caso es que después de la paliza que les pegúe a estas pobres tetas mías, debieron rendierse y pensar que quizá fuera mejor facilitar las cosas si no querían quedar para el arrastre y de un día para otro aquello empezó a salir como dios manda.
Cuantas veces pienso ahora, lo fácil que me agobiaba en los primeros meses por cuestiones a las que ahora le doy apenas importancia.
Lo bueno fue que empecé pronto, por lo que cuando me tocó reincorporarme, tenía una buena reserva de leche de mami rica rica.
Abrías el congelador y aquello parecía la central lechera asturiana. Todo ordenadito por cantidades, por fechas. La leche, vamos!, nunca mejor dicho.
Cuando empecé a trabajar, diariamente me sacaba aproximadamente 180 ml en diez minutos, era la envidia de las vacas frixonas del lugar. ¡Qué chorro!, ¡qué velocidad de ordeño!, aquello era insuperable...
Aquella leche la guardaba en el frigo para que al día siguiente mi madre pudiera darle la leche fresca a Boliche.
Y si algún día no me podía sacar, no me preocupaba porque podía tirar de las reservas.
Pero era raro el día que no podía. En el trabajo no tenía problema porque estaba sola, con lo que me podía pasear con las domingas al aire si quería sin miedo a que me denunciaran por escándalo público.
Y así estuve desde los 3 meses hasta los 9 meses.
De esta forma siempre tenía leche en el congelador y mi producción no disminuía.
Eso sí, aquello fue un auténtico coñazo. De ahí mi amor-odio a ese maldito cacharro.
Gracias a él pude mantener la lactancia exclusiva sin problemas hasta que comenzamos a introducir la alimentación complementaria cuando me reincorporé al trabajo y además, como comentaba antes, mi producción de leche no se vio mermada en lo más mínimo.
Esos momentos de ir con la teta colgandera de paseo, y todo el día de acá para allá con el porta biberones térmico para que no se estropeara la leche..., que tiempos aquellos!, por suerte o por desgracia, se pasan volando.
Esa leche..., tenía un valor incalculable para mí, era oro líquido, sobre todo por el esfuerzo que suponía todo el proceso de sacar, transportar, conservar, clasificar, etc.
Joer, que despliegue!, pero es que de aquella leche no se podía desperdiciar nada.
Me viene a la memoria un día que estaba en la cocina y el papá de Boliche en un descuido tiró parte de la leche que yo iba a guardar. Buenooooooo!!!!, casi me lo como! y encima me dice que no me ponga así que no era para tanto,. Buuuuuhhhh, tu no sabes lo que has dicho majo, te la vas a cargar!!!! jajajaja
Y efectivamente no era para tanto, dejémoslo en que fue un momento de enajenación transitoria, pero sí, es cierto que para mí en ese momento si era para eso y para más.
Aunque entiendo que es difícil para una persona que lo ve desde fuera no llegar a comprender que eso que acaba de tirar, no solo es leche. Es esfuerzo, es tiempo, es dedicación, es amor.
Por todo ello, aunque reconozco el gran esfuerzo (que no sacrificio*) que conlleva y comprendo al que no quiera pasar por eso, estoy contenta por elegir la opción de sacarme la leche, porque por encima de todo el gran beneficiado siempre iba a ser Boliche.
*Sacrificio: RAE, Acción a que alguien se sujeta con gran repugnancia por consideraciones que a ello le mueven.
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Luchando en una guerra sin cuartel por la supervivencia de nuestro pequeño tesoro: LA LACTANCIA MATERNA.
"...El placer ha sido mio..."
...El placer ha sido mío...
SACRIFICIO (RAE): Acción a que alguien se sujeta con gran repugnancia por consideraciones que a ello le mueven.
No, señores y señoras, dar el pecho no debe ser un sacrificio. Debe ser un PLACER.
SACRIFICIO (RAE): Acción a que alguien se sujeta con gran repugnancia por consideraciones que a ello le mueven.
No, señores y señoras, dar el pecho no debe ser un sacrificio. Debe ser un PLACER.
miércoles, 1 de junio de 2011
Mi aliado más odiado
Etiquetas:
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PERSONAL,
SACALECHES
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Yo no me saqué la leche y seguramente tampoco lo haré. Empecé a trabajar a los 6 meses y con mi Pequeñín también a los 6 meses. Así que tomaran lactancia exlusiva los 6 primeros meses y no me sacaré. Con mi Bichito la daba antes de irme a trabajar y en cuanto llegaba de la guarde y haré lo mismo con los dos o eso espero.
ResponderEliminarPor cierto, las vacaciones no estan tan lejos, yo me voy el viernes!!!
Yo también le tenía un amor-odio considerable. Será porque era el mismo que el tuyo??? de la misma marca?? Si volviera atrás, sacaleches eléctrico sin ninguna duda vamos.
ResponderEliminarMe ha gustado tu distición esfuerzo-sacrificio. Efectivamente es un esfuerzo en ocasiones..... pero en ningún caso un sacrificio. Yo me saqué leche hasta que hizo el año y de ese modo no utilizamos leche de fórmula. Teniendo la reserva lechera que yo tenía, hubiera sido tontería :)
Buff, yo me compré uno electrico y lo utilize una o dos veces solamente, no me gusto nada! Me sentia literalmente como una vaca lechera! Soy una vaca lecheeeera, siempre con la teta fueera... tralara-tralara!
ResponderEliminarhttp://yoymisminiyos.blogspot.com/
uf! como me has recordado a mi! por suerte lo mio duró apenas dos meses, a l que pude le incorporé las frutas para sustituir un biberón, y luego las verduras para el otro. Yo apenas podía sacarme leche! y lo mío fue uf! me prestaron uno eléctrico pero metía un ruido de la leche, nunca mejor dicho, y solo lo use los primeros días antes d emepzar a trabajar. como me sacaba la leche por las noches (que es cuando se tiene menos) lo hacía con una pera!!, si si, ni manual ni ostias, una pera, que se llenaba con 10 ml y tenía que ir tirandola leche al biberón. Se me cayo dos veces por el sofá cuanddo ya estaba lleno, y era para el día siguiente porque no tenia reservas!! no veas como lloré!!!
ResponderEliminarYo tengo el Avent eléctrico, y he pasado por temporadas de todo, no sacar nada, sacar 150 en un momento... Ahora encuanto empiece a trabajar como llego con las tetas a petar aprovecharé para volver a sacarme y dejaré polos hechos o simplemente leche para que le de su papi.
ResponderEliminarNeni, yo lo tenia manual, y gracias a dios la leche no me subio, porque odie aquel cacharro con todas mis ganas, y solo fueron dos semanas, a mi tambien me tiraron la leche despues de media hora de trabajo, pero yo no me enfade, de la impotencia me puse a llorar como una magdalena(habia dado a luz hacia 5 dias) y mi marido se sintio tan mal, que lo probo, si si, se lo puso al pecho y le dia manibela, ahi supo lo molesto que era...
ResponderEliminarAhh...y nosotros lo quemamos en la hogera de San Juan del 2008, jajaja...
Un besote reina.
Yo tengo el mismo que tu, pero gracias a dios, apenas lo use en dos ocasiones, eso si.. desesperante¡¡ ver como no sale nada¡
ResponderEliminarPero dicen que sobre todo lo importante es que se estimula el pecho noo?? asi no se pierde la lactancia.
En mi caso es que lo use ya con la lactancia superestablecida con pitufo de 18 meses. Una semana que se quedo con su papa y abuelos en la playa y la menda volvio a trabajar. Y funciono.. no salia casi leche, pero a la vuelta, pitufo volvio a retomar.
Yo tengo uno eléctrico de Medela y estoy contenta con él, lo único que al haberme cogido la excedencia no lo he utilizado tanto.
ResponderEliminarNo me extraña, querida, tal y como lo cuentas parece un objeto de tortura ¡Ay, que daño! me alegra que puedas prescindir de el.
ResponderEliminarBesos.
Ayyyy yo estoy en la relación amor-odio en estos momentos!!! Para nosotros es fundamental, me saco 180ml para que a la mañana siguiente se lo de mi madre a la gordita. Yo cuando llego de trabajar me pongo dale que te pego, pero lo bueno es que es electricooooooo!!!! La mejor inversión jamás hecha!! Me ha encantado el relato de esta maravillosa relación... Un besazo
ResponderEliminarYo tenía el mismo que tú (se lo pasé a alguien, no recuerdo a quien) y me iba muy bien. Llenaba los botecillos en nada ¡afortunadamente! lo usé muchísimo, desde que me incorporé al trabajo alos 6 meses. Lo peor fue explicarles todo el proceso a las de la guarde..lo mejor que aceptaron encantadas!
ResponderEliminarComo odio ese artilugio!!!!....yo me intentaba sacar con uno manual que me prestaron y no salía casi nada, pero mis tetas goteaban lecheee a todas horas!!!
ResponderEliminarQué frustración!!!
Qué recuerdos! Yo hice lo mismo con mi primer hijo, hace 11 años, y el mismo sacaleches. Había días que me sacaba en la oficina tan ricamente 220 ml, anda que no estaba yo orgullosa ni nada! jaja! Y es verdad, se hace tan a gusto y se valora muchísimo. Dentro de un mes volveré a empezar, que el 1 de agosto me toca volver y no tengo ni 1 ml en el congelador! Por cierto, el sacaleches que uso ahora es el mismo, lo guardé como oro en paño.
ResponderEliminarYo nunca conseguí sacar gran cosa pero supongo que era porque el niño no estimulaba lo suficiente y así no había manera. Me lo ponía unos 40 minutos por teta y, qué se yo, a lo mejor sacaba 60 ml en todo el día, muy poco, la verdad. No le tengo mucho cariño yo al sacaleches, aunque me dolía menos que el nene, eso sí.
ResponderEliminarMe reafirmo una y otra vez en mi opinión: eres una súpermami de mucho cuidado.
ResponderEliminarYo también fuí de las que maltraté mis tetas cuando comencé a trabajar, me llevaba el artilugio al trabajo y menos mal que el jefe tenía su casa al lado de la empresa, me metía en su cocina y venga a ordeñar!...me ponía el despertador a las 3 o 4 de la mañana porque mis hijas no fueron de tomas nocturnas, una que tiene suerte, y así día tras día durante 4 o 5 meses...luego con la peque me obligaron a sacármela por los problemas que tuvo la niña con las piernas y tenía que estar colgada sin poder cogerla en el colo...así me han quedado de lindas...las tetas digo!
ResponderEliminarYo también le tengo un poco de tirria al aparatito, uno manual de medela. Lo usé los primeros días, porque no me bajaba la leche, hasta que me bajó (a lo bestia, claro). Y luego tres días que me dieron un medicamento, y no le podía dar de mi leche (lo usé dia y medio, hasta que me enteré que ¡no hacía falta!!! por la página web del hospital de Denia...), y luego para algún día suelto, aunque como mis consultas son de 2-3 horas, lo normal es que le diera la siguiente toma un poco retrasada, y ya.
ResponderEliminarAh! mi marido también tuvo bronca por tirar leche... es que no se dan cuenta de lo que cuesta...
Yo no he usado nunca el artilugio en cuestión, imagino que debe ser muy engorroso, pero el relato rezuma AMOR. Me ha parecido precioso.
ResponderEliminarFue horrible!! durante semanas me saqué leche para cuando empezara a trabajar y la congelé, cuando más adelante quise usarla la tuve que tirar porque me olía fatal, así que para nada.
ResponderEliminarLuego me sacaba algunos días para hacer la papilla aunque no salí demasiado, para llenar un vasito me lo tenía que enchufar 3 ó 4 veces al día y era desquiciante, ya que no podía sacarme ni justo después de que hubiera chupado y mucho después por si volvía a querer...
No sé si lo repetiré :(
Sí, estuve más de 20 días sacándome la leche y tirándola porque mi Neni solo quiso biberón y encima mi pediatra (amiga para más inri) potenciaba el bibi... si es ahora... me pongo a la niña las 24 horas del día a la teta y punto!!
ResponderEliminarBss... amiga.
Yo también lo usé mucho al principio pero porque se me ponían las tetas que alguna vez llegué a pensar que me iban a explotar. De hecho con la derecha (siempre ha ido un poco a su bola) no hace tanto que lo utilicé, aunque también es verdad que las últimas veces el ordeño ya lo hacía a mano.
ResponderEliminarMe ha gustado la matización de "no sacrificio".
Yo tambien usaba el de avent. Tengo el electrico pero usaba mas el manual y al principio, fatal pero luego pille el truquillo pero le leche que guardaba no valian casi para nada! Mi hija nunca ha gustado el biberon... La madre que la pario que soy yo!!!
ResponderEliminarYo tuve 2 uno manual q sólo use el primer día y uno eléctrico ambos de medela, a mí con lo que me costaba sacar un tarrito de 20 me lo llega a tirar y hubiese corrido la sangre jejeje.
ResponderEliminarPor cierto que me acabo de enterar de que sólo hay que poner 10 o 15 minutos el cacharro y luego esperar 1 hora
Lo que yo te diga, Reinona: que tú y yo somos primas hermanas. No veas lo que les recalco yo a las madres que vienen al grupo de apoyo que nada de sacrificios. Ains.
ResponderEliminarYo, por suerte, no he tenido que tirar de sacaleches más que en momentos puntuales. No necesité hacer nunca reserva de leche; y menos mal, porque me parece heróico, y yo soy más gandula que el malo de Lazy Town.
Besos churriiiii!
Te comprendo perfectamente porque yo nunca logré sacar nada en claro del sacaleches y nunca mejor dicho. Y eso que lo intenté pero mi hijo tomaba leche en cantidad y ese aparetejo no lograba sacar nada, era un misterio, eso o que yo era un desastre usándolo. Menos mal que me incorporé al trabajo cuando el peque tenía casi 7 meses (sume baja y vacaciones y todo lo sumable) y cuando empecé a trabajar lo hice a tiempo parcial, y a media mañana el bibe que le daba mi suegra era de leche artificial, tuve la suerte de que mi bebé tomaba tanto mi leche como la artificial de maravilla. Y eso duró poco porque por aquella época empezamos con la alimentación complementaria, así que la combinamos ya directamente con la leche de mi pecho hasta más o menos los 15 meses de edad. Progresivamente le fui restando tomas de leche y añadiendo otros alimentos. Y ya digo a los 15 meses mi hijo se destetó por completo, justo cuando empezó la guardería, fatal error, porque ahora con el tiempo desearía haberle dado pecho más tiempo.
ResponderEliminarMe gusta la distinción que haces entre esfuerzo y sacrificio y está muy bien explicado.
ResponderEliminarYo sigo con el sacaleches (en mi caso el eléctrico de Medela, la mejor compra) a cuestas, ya que el nene precioso toma a las 6 de la mañana y despues al recogerle de la guarderia a las 15'45 y como no quería que me bajara la producción de leche(ya que es mi leche la unica que toma)es la solución posible.
Como me ha salido sibarita y no le gusta tomarla si no es directamente del envase original, como yo lo llamo,(ni en papilla, ni en bibe, ni nada de nada)tomamos la decisión de donarla al 12 de Octubre, para que así otros bebés que la necesiten puedan usarla...(porque lo de tirarla me da un dolor en el corazón tremendo)
Asi es que ahí estamos, ya tenemos un montón de "hermanitos" y la producción sigue intacta...
Besitos
Yo me escapaba del trabajo porque con el sacaleches imposible, cuando la gordi estuvo ingresada no tenía más remedio y casi me muero, que odio por favor !!! Eres una campeona :)
ResponderEliminarhola teta! hacia tiempo que no entraba.. ando algo liada..
ResponderEliminarel caso es que en breve yo tambien me incorporo al trabajo, mi niña tiene 5 meses y esta con pecho, fruta y cereales recientemente.. aunque mi idea siempre habia sido de lactancia exclusiva hasta los 6 meses, pero por una cosa y por otra, tuvimos que introducirle alimentación complementaria.. el motivo es muy sencillo, al estar en el paro y de haber dejado cientos de curriculums, siempre tienes la posibilidad de que te llamen de un dia para otro, y como tu bien sabes de un dia para otro no puedes sacarte unos 4 o 5 biberones, (por lo menos yo)..
te explico esto porque ahora voy a trabajar, (todavia no se la fecha, pero calculo que en menos de 1 semana me llamen) estoy muy agobiada porque cuando me dispongo a sacarme leche no saco mas de 60ml y claro eso no es suficiente, aunque voy haciendo descansos a cada rato, pero ni aun asi supero los 80ml.. que me aconsejas? lo he intentado todo, como tu, ponerme con la niña, mirar foto, ponerme calor.. pero no hay manera.. agradezco que me "ayudes" y si hay alguna mami que se haya encontrado en la misma situación agradeceria que me diera su opinion..
por otro lado, seguramente, en el trabajo pueda sacarme leche, como lo hacias tu? es decir, como te organizabas para guardar la leche, se puede congelar? o mejor guardarla en la nevera?
alguna vez me he sacado leche y la he congelado, con su fecha y todo, pero recien sacada...
bueno gracias de ante mano! y felicidades por el blog, me encanta!!!
http://noestandificil-june.blogspot.com/
por cierto, mi sacaleches es electrico, es el medela, tengo el manual pero no me gusta nada, sin embargo el electrico es una maravilla..
ResponderEliminarJo, Teta, a mi me pasó igual... Yo tenía el mismo sacaleches que tú, pero una amiga me dejó uno eléctrico, y mucho mejor!!!! A veces, para acabar antes, usaba los dos a la vez. Cómo odio ese ruído del sacaleches, aunque no sé qué hubiera hecho sin él. Una vez se me cayó lo poco que solía salirme y estuve más de 1 hora llorando. Me entristezco mucho al recordar esos meses, porque pasé tantas horas con el sacaleches... buf, qué agobio. Y mi congelador estaba hasta arriba de leche, como no sabía cuándo la iba a tener que usar... hace poco tiré toda la que quedaba, y ya dijimos adiós a la leche congelada. Ahora sólo la toma fresca, directamente de su envase original.
ResponderEliminarMuchas gracias todas por vuestros comentarios.
ResponderEliminarVeo que casi todas hemos tenido nuestros más y nuestro menos con el dichoso aparatito, que si bien es cierto que es un poco rollo y algo engorroso, gracias a él, muchas hemos conseguido mantener la lactancia por un largo periodo de tiempo con el consiguiente beneficion para nuestro enanos.
June, a ver cariño, te cuento.
Visto desde mi experiencia, lo que yo haría en tu lugar "ahora", sería lo siguiente.
Yo me eseguiría sacando leche. LO que salga. Sin agobiarte.
Ducha de agua caliente, inclinate hacía adelante y masajea el pecho.
Que tienes leche para ir dandole genial y si en algún momento te quedas sin leche de reserva, pues le das leche de fómula y punto.
NO te agobies que no pasa nada, porque tú le vas a seguir dando de tu leche.
Si me apuras, casi te puede suponer más problema el introducir el biberón y sustituir alguna toma de teta por el biberón, con el riesgo de que le coja el gusto y decida cambiar, que le vayas a dar algún bibe de leche de fórmula.
Boliche tomaba su biberón que le daba mi madre con mi leche y por suerte en aquel momento no tuvimos problema porque él seguís prefiriendo la teta de su madre que el bibe.
VE congelándola y ya está. Hasta donde puedas o donde quieras.
Yo en el trabajo no tenía problema porque estaba sola, pero me metía en el baño, un rato tranquila y en 10-15 minutos listo.
En mi oficina tengo nevera, así que cerraba el botecito y al frigo. Me llevaba el portabiberones térmico para cuando salía de la ofi, transportarlo ahí y me iba a casa, pegatina y directo al congelador.
Si no tienes nevera, puedes comprarte una de esas que lleva unos paneles que se desmontan y que llevan agua. LOs metes en el congelador y por la mañana lo montas y te agunatará bastante.
También puedes comprar varios botes de toma de muestras de orina, llenarlos de agua y congelarlos para luego se te mantenga la leche fresca.
La puedes guardar fresca para tomar al día siguiente o congelarla sin problema.
Un besito guapa.
Chapeau por las que usais el saca-leches! Para mí fue siempre un "artefacto2 que nunca me gustó y me negué a usar. Mientras pude les di pecho, y luego bibe... Lo siento, pero lo del saca-leches no es para mí...
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