Mamá, pis!

Desde hace 3 semanas, Boliche tiene la costumbre de sentarse en el orinal cuando le dejo desnudo en el baño para, a continuación, meterle en la bañera.
Se sienta, dice pis!, y luego se levanta. Pero nunca lo hace.

Antes del verano le compré el orinal para que se fuera familiarizando con él.
Aunque todavía es bastante pequeño y sé que le falta tiempo para la operación pañal, quería que fuera viéndolo como un acto habitual.

Cuando yo iba al baño, el venía detrás. Yo a lo mío y el a lo suyo, pero siempre se sentaba vestido y con el pañal puesto. Alguna vez me hizo quitárselo pero nunca hacía pis.

El miércoles, después de llegar del parque, fuimos directos a descargar el medio kilo de tierra que llevaba en las zapatillas y luego a preparar el baño.

Le quité la ropa y le dejé en pelotillas para que él empezara con su ritual del orinal.
Le veo que se sienta, me mira como siempre y me dice pis. Yo le digo, muy bien hijo, a ver como haces pis.
Dice ppppsssssshhhhh, ya ta’. Se levanta y mira el orinal. Yo le digo, pero trolerillo si no has hecho pis, me querías engañar (todos los días hacemos/decimos lo mismo) y se parte de risa.
Mientras, me doy cuenta de que el agua de la bañera está fría, ¡porras!.
Tiro la mitad (con el cargo de conciencia correspondiente) y pongo el agua bien caliente para que quede a su justa temperatura.
Mientras hago eso, no veo lo que está haciendo Boliche. Me doy la vuelta y está de pie mirando el orinal y me dice, pis!. Miro el orinal y veo que ¡¡¡¡hay pis en el orinal!!!!!, pero bueno y yo me lo he perdido!!!!!!!!! Nooooooooooooo!!!!!!!.

Me pongo a jalearle y le digo lo bien que lo ha hecho, que es un niño grande y mayor, ¡¡¡¡¡qué alegría!!!!!.

Se pone todo nervioso con una sonrisa de oreja a oreja, yo sigo felicitándole mientras él se pone a dar vueltas (desnudo) y moviendo los brazos como si fuera un pajarillo batiendo las alas, jajajajajajajaja, que contento estaba.

Le cojo y le pego un achuchón muy fuerte y mientras, sigue gritando, pis!, pis!, pis!, muy bien Titas!, muy bien Titas! (Boliche así mismo se llama Titas, ya os lo explicaré otros día).


Después de darle 20 o 30 besos, le meto en la bañera, juega un rato, le baño, cena, llamamos a papá, que esta semana está fuera de viaje, para contarle la gran hazaña de Boliche y a momir.

Me hizo mucha ilusión que hiciera pis él solito, pero me dio una rabia tremenda habérmelo perdido.
Me encanta ser testigo de todas sus “primera vez”.
Es una pena que él no lo recuerde cuando sea más mayor.
Y es una pena que olvidemos todos los recuerdos de nuestra más tierna infancia.

A mí, me encantaría recordar las cosas que hacía yo cuando tenía la edad de Boliche.
Creo que mi primer recuerdo fue de cuando tenía yo tres años, casi cuatro. En la guardería de mi madre. Era mi profesora y me tenía frita jajajajajaja, debía ser recíproco porque según ella, yo era la que le revolucionaba el gallinero. Así que me pasaba castigada casi todos los días.
¡Qué recuerdos!.

Que paseis buen fin de semana todos.
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